viernes, 2 de enero de 2009

Zarpó el barco

Foto:Heriberto Castro/ Primera Hora





Tras la juramentación hoy de Luis Fortuño como el noveno gobernador electo por los puertorriqueños, el país comienza una nueva etapa llena de esperanzas e incertidumbre. Esperanzas porque cualquier cambio parece bienvenido después de haber pasado por el vendaval de cuatro años en los que las agendas político partidistas e intereses personalistas de quienes fueron los protagonistas de la cosa publica dominaron la escena nacional. Incertidumbre porque el panorama no permite otra cosa. El déficit del gobierno, aunque aun objeto de controversia, ciertamente dista mucho de lo tolerable. El IVU parece haber tenido un balance perdidoso sobre todo porque nunca pareció configurarse un mecanismo efectivo para fiscalizar su cobro y porque, en tiempos de desaceleración económica, solo parece haber evitado que el consumidor consumiera. Y como si algo faltara para hacer más patético el panorama, la crítica situación de la economía del amigo del norte no da para mucho.
En fin, que habrá que echar el resto. Y cuando se habla de resto, nadie puede quedar escondido tras la cortina a la hora de aportar. Ya se verá si el nivel de sacrificio que, muy justificadamente se anticipa, alcanzará a todos y todas o, como anticipan algunos críticos, solo a los muchos que componemos la clase trabajadora. Si de algo sirve, ya en sus primeras palabras como gobernador en propiedad, Fortuño pareció apuntar en esa dirección.
Otro cantar será el asunto de la conservación y protección de nuestros recursos. Este asunto, con o sin merecerlo, se ha convertido en uno de los talones de Aquiles del nuevo gobernante, vinculado insistentemente a los tan cacareados grandes intereses del país. Y aunque ser rico y caminar entre ricos no debe ser visto como impedimento (ser pobre y caminar entre ellos ciertamente tampoco) el Gobernador deberá demostrar con sus actos que no le aplicará aquello de dime con quien andas y te diré a quien favoreces…porque claro, así es que reza el dicho que acabo de reinventar con toda licencia poética. En cualquier caso, la presencia en los actos de juramentación del desarrollador Arturo Madero no ha hecho otra cosa que echarle leña al fuego de la hoguera encendida hace mucho por el sector ambiental. Sucede que la estampa de Fortuño y Madero como invitado a su misa de Consagración hace que inevitablemente resuene en nuestra mente el momento en que, en plena controversia de Paseo Caribe (Sí. El proyecto de Madero) el Gobernador calificó a los manifestantes en contra del proyecto en cuestión de “terroristas ambientales”. Claro. Si todo parece caer en su lugar, dirán algunos. Pero si lo que cae, caerá en su lugar o no es algo que el nuevo Gobernador demostrará sobre la marcha. Por lo pronto, desearle éxito ante el panorama heredado es lo menos que cualquiera que se precie de querer algo a esta tierra debe hacer. En esto de navegar por mares tempestuosos en un barco que hace agua, se nos va la vida a tod@s.

3 comentarios:

El Cizañero dijo...

No me percaté en ninguna de las coberturas que vi o escuché ayer que Madero estuvo en la toma de posesión. Eso no es una ligereza, amigo Julio. La toma de posesión es como una boda, un cumpleaños o un aniversario especial: tú invitas a quien te quiere, a quien tú quieres,a quien crees que te ayudó a ser lo que eres, en fin, gente especial para ti. Francamente, no espero mucho de Fortuño. Pero esto de invitar a Madero me parece francamente escandaloso.

Ramón A. Miranda dijo...

Arturo Madero en la toma de posesión fue un gran ATUKITI para todos los que se comieron el cuento de que no habían intereses.

Nah que ver, solo la cara de Fortuño me emana un mal presentimiento. Pero el es nuestro Generalísimo ahora que trabaje o QUE TRABAJE!

Prometeo dijo...

Pero y que me dicen de el nombramiento del macanero, "sazonador" José Figueroa Sancha a dirigir la policía. Este gobierno se está preparando para una confrontación. Fortuño viene con el cuchillo en la boca y va a cortar para los que menos le importan la clase trabajadora. A mi lo que se me quedó dando vueltas en la mente fue la frasecita esa de que "nos dirán que la medicina es amraga..."

Julio me llevé una oración de la entrada como frase del momento para mi blog. Adelante y éxito.