230 East, 51 Street, New York

Si. Lo sé. Admito que he estado alejando del mundo de blog por algunas semanas. Es que el bloqueo, a pesar de sus tentadores encantos, en ocasiones choca de frente con los trajines del diario en el otro mundo. El que vive, respira y demanda atención fuera del éter. Además me he tomado unos días para “desintoxicación” antes de la recta final de las elecciones. Para esto último me fui a Nueva York que, en tiempo reciente, se ha convertido en una de mis ciudades favoritas. Allí estuve inicialmente guardando silencio (aunque ello parezca imposible en medio del trajín de la Gran Manzana) y, posteriormente, compartiendo con amistades y disfrutando de la noche niuyorquina. ¿Qué les puedo decir? El Pod Hotel ,en la 51 y segunda avenida, se convirtió en mi casa por cuatro días. Para los viajeros con poco presupuesto pero que buscan un hotel céntrico en Manhattan, el Pod es ideal. Se los recomiendo. Moderno, con conexión gratuita al Internet en los cuartos y áreas comunes, un patio interior ideal para el desayuno y una azotea con una vista impresionante.
Desde el Pod me moví a donde hiciera falta. Mi primera parada en la noche niuyorquina fue In the Heigths, ganador de Musical del Año en la pasada entrega de los premios Tony y escrito por el puertorriqueño Lin-Manuel Miranda. Simplemente genial. Miranda ha logrado con esta propuesta tomar la historia de los hispanos en Estados Unidos donde West Side Story la dejo hace décadas, echando en la basura la imagen de los latinoamericanos como sinónimo de vándalos y miembros de gangas urbanas. Si van a NY no pueden perdérselo.
Una sorpresa grata fue la invitación a la presentación en NY del nuevo libro de Ana Lydia Vega, Mirada de Doble Filo, en el centro de Estudios Puertorriqueños del Hunter College. Allá me encontré con la amiga Nydia Suárez (la manager de “Jacinta”) y Ángel Collado Schwarz (La Voz del Centro). Entre el público también encontré a Antonio Martorell y la querida profesora Magali García Ramis quien tuvo a su cargo la presentación puesto que Vega sufrió un accidente a su llegada a Nueva York que la mantenía en el hospital e imposibilitada de acudir a su propio evento.
Aprovechando mi estancia acudí al concierto que ofreciera Janet Jackson en el Izod Center de New Jersey ( a quince minutos de Manhattan). El espectáculo estuvo genial. Es de esos conciertos de las pocas figuras que han podido sobrevivir con éxito su reinado en los 80’s y 90’s y que tienen la virtud de ofrecer shows memorables y relevantes tras mas de 20 años de carrera profesional. En este concierto tuve lo más cercano a un choque con el tema político de la isla en una de las cantinas de cerveza. ¡Se imaginan! Pero eso es harina de otro costal…
El resto de mi tiempo en NY lo ocupe comiendo, tal y como debe ser. En su próxima visita no pueden dejar de visitar Pescatore si les gustan los mariscos y la pasta, y Buzina Pop, un restaurante brasileño buenísimo en la avenida Lexington. Para unas copas, el Alphabet City en el Lower East Side esta lleno de negocios buenísimos visitados por locales. Unas orejitas para que se devoren la Gran Manzana.